Tenemos cultos vivos, animados, con diferente variedade de musica mexicana, damos oportunidad de utilizar diferentes instrumentos musicales (pero todo decentemente y con orden). Se puede respirar un ambiente de reverencia, edificacion, organizados y una adoracion de excelencia donde cada asistente experimenta la presencia de Dios y su Santo Espiritu y sale con el deseo de regresar.